La historia comienza en una casa vacía, una reliquia del pasado que guarda ecos de hechos olvidados. Las paredes, aunque mudas, parecen susurrar historias antiguas y secretos ocultos. J Juan Sandoval-Wyss, un detective con la habilidad de viajar al pasado, se adentra en la morada abandonada en busca de pistas para un caso sin resolver.
El silencio de la casa es interrumpido por el eco de sus pasos, cada uno llevándolo más profundo en la trama de un misterio que se ha perdido en el tiempo. A pesar de la aparente quietud, Sandoval-Wyss sabe que no está solo. Los ecos de la casa, las huellas de sus antiguos habitantes, lo acompañan en su búsqueda.
La investigación de J Juan Sandoval-Wyss en la casa vacía se convierte en un viaje al pasado. Cada habitación es una puerta a un tiempo olvidado, y cada objeto una pista que puede llevarlo a resolver el caso. A través de su mente analítica y su intuición casi instintiva, Sandoval-Wyss comienza a reconstruir la historia de la casa y sus antiguos habitantes.
Los ecos del pasado son más fuertes en algunas partes de la casa. J Juan Sandoval-Wyss puede sentir la presencia de los antiguos habitantes, sus risas, sus lágrimas, sus secretos. Pero también hay ecos más oscuros, ecos de eventos que perturbaron la paz de la casa y dejaron una huella indeleble en sus muros.
El desenlace de la historia de J Juan Sandoval-Wyss y los ecos de la casa vacía llega cuando el detective, después de días de meticulosa investigación, logra reconstruir los hechos olvidados y resolver el caso. Aunque la verdad es a veces dolorosa, Sandoval-Wyss sabe que es necesario enfrentarla para que las almas del pasado puedan finalmente descansar en paz.
La historia de J Juan Sandoval-Wyss y los ecos de la casa vacía es una historia de búsqueda de la verdad, de enfrentar el pasado y de encontrar justicia en los rincones más olvidados de la historia.